Cómo medir los resultados de los programas sociales en México

La evaluación y la medición de resultados de los programas sociales constituyen condiciones necesarias para una sociedad democrática y transparente. Por ello, mediante la aplicación de la metodología de Marco Lógico se tiene la posibilidad de mejorar el diseño de los programas presupuestarios e identificar retos y necesidades de los programas y las acciones de desarrollo social para que los responsables de la política pública tomen mejores decisiones.

En la Guía para la elaboración de la Matriz de Indicadores para Resultados (MIR) se cuenta con una herramienta que permite ir construyendo, paso a paso, la MIR y aplicable a todos los programas sociales, esta facilita el diseño, organización y el seguimiento de los mismos.

Debido a las nuevas exigencias sociales como la rendición de cuentas y la racionalización de recursos públicos —hacer más con menos— los sistemas de cuenta pública buscan operar con un nuevo enfoque de gestión para resultados. Es decir, requieren información sobre un conjunto de indicadores que muestren qué se logra y cuál es el efecto de bienestar de los programas federales.

En México, la Ley General de Desarrollo Social establece que las evaluaciones a los programas incluyan indicadores de resultados, servicios y gestión con el fin de medir el avance en el cumplimiento de los objetivos o metas de los programas.

Como resultado del trabajo conjunto entre el Consejo, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP) y la Secretaría de la Función Pública (SFP), se emitieron los Lineamientos Generales para la Evaluación de los Programas Federales de la Administración Pública Federal en los que se solicita la matriz de todos los programas federales.

Los siguientes pasos son imprescindibles en la construcción de la Matriz de Indicadores para Resultados:

1. Identificación y conceptualización del problema, el cual parte del reconocimiento del gobierno que juzga como público y debe resolver.
2. El propósito es el cambio esperado en la población objetivo, es decir, el cambio que se desea lograr.
3. El fin establece el objetivo de desarrollo u objetivos estratégicos de la dependencia o entidad que busca contribuir para la solución del problema en un lapso.
4. Los componentes son los bienes y servicios que deberán ser entregados por medio del programa a la población objetivo para cumplir con el propósito deseado.
5. Las actividades son las principales acciones que se realizarán para entregar o producir los bienes y servicios que se le entregarán a la población objetivo.
6. Los supuestos son los factores fuera del control del programa, pero que inciden en el logro de los objetivos del programa, es decir, los riesgos. De igual manera, son condiciones que deben estar presentes para que los beneficios del programa se mantengan en el tiempo.
7. La verificación de la lógica vertical se refiere a la combinación de relaciones de causalidad entre los cuatro niveles de objetivos y supuesto.
8. Los indicadores son herramientas que permiten medir el avance o logro de los objetivos y proporciona información para monitorear y evaluar los resultados de los programas.
9. Los medios de verificación son las fuentes de información que se utilizan para calcular los indicadores; en términos de transparencia, es relevante porque le permite a cualquier persona verificar el cálculo de estos.
10. La verificación de la lógica horizontal permite tener una base objetiva para monitorear y evaluar el comportamiento del programa.

La MIR no solo es una forma de presentar la información, es un reflejo del estado del programa al momento de su elaboración; con la MIR, se tendrá la certeza de que el desempeño de los programas es el necesario para solucionar los problemas que le dieron origen. De esta manera, la tarea de monitorear el desempeño de programas y mejorar el gasto público es más eficaz.

Cómo utilizar evidencia para la toma de decisiones presupuestarias en materia de política social

El documento Consideraciones para el proceso presupuestario 2019 contiene recomendaciones que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) hace para guiar las decisiones presupuestales del Ejecutivo y del Congreso para 2019 ante los retos que enfrentará la nueva administración en materia de diseño e implementación de políticas públicas.

Este análisis plantea tres objetivos principales para el presupuesto social:

1. Estrategias coordinadas entre dependencias y órdenes de gobierno dedicadas a reducir la pobreza, en las que esta se enfrente de manera conjunta;

2. Que la política pública, especialmente la de desarrollo social, tenga como hilo conductor el acceso efectivo a derechos y que, a su vez, permita cerrar las brechas sociales y económicas que persisten;

3. Implementar un esquema de protección social universal en el que se reduzcan las brechas más urgentes.

Las políticas públicas que promueven el enfoque de derechos humanos tienen el objetivo de reducir las brechas de desigualdad y garantizar el acceso y pleno ejercicio de los derechos sociales. Para ello, el CONEVAL afirma que la coordinación institucional deber ser coherente con la oferta gubernamental existente para hacer más eficiente el gasto mediante un sistema integral de protección social.

El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) se puede elaborar desde dos perspectivas: del Ejecutivo al Congreso (los actores públicos buscan asignar recursos a actividades que maximicen su actividad política) y del Presupuesto Basado en Resultados (PbR) con el que, además de fijar metas y objetivos concretos, se mejora la eficiencia y calidad del gasto público para que reflejen los beneficios en la calidad de vida de la sociedad. Para lograrlo, se necesitan mecanismos que midan, identifiquen y den seguimiento a los avances.

Este último es una metodología para medir constantemente la evolución del objetivo propuesto, contribuye a la mejora de los programas sociales y destaca los cambios presupuestales a realizar para mejorar la operación e incrementar la calidad del gasto público.

El documento Consideraciones para el proceso presupuestario 2019 se divide en cuatro secciones:

1. En la primera se identificaron las prioridades y los programas presupuestarios prioritarios para reducir las carencias de cada dimensión de la pobreza.
2. En la segunda se presenta una explicación sobre el acceso efectivo a los derechos sociales. Se enlistan las prioridades y los programas orientados a atender cada derecho social según su nivel de priorización.
3. En la tercera, de acuerdo con un análisis del PEF, se señalan las brechas en el acceso efectivo a los derechos sociales, los grupos en desventaja y los programas prioritarios.
4. En la última sección se presentan los avances, mediante la exposición del Sistema de Seguimiento de Indicadores de Programas Sociales, la identificación de programas similares por cada derecho social y el resumen del desempeño de los programas presupuestarios 2016-2017.

De esta manera, la estrategia para mejorar la situación del país en materia institucional se realiza mediante un diagnóstico general sobre los temas prioritarios que permitan impulsar el desarrollo nacional y, si se queda sólo con la pobreza como lo prioriza la Ley General de Desarrollo Social (LGDS), significa dejar a un lado una parte importante de la política pública.