25 años de Política Social (y Económica)

Gonzalo Hernández Licona, Secretario Ejecutivo del CONEVAL
@GHLicona

Hay al menos dos señales de éxito en una sociedad: a) cuánto valor agregado (económico, político y social) se genera y b) que todos tengan oportunidades similares de participar en lo primero. El segundo punto no sólo es por justicia social. La eficiencia en la generación del valor agregado, como el PIB, se ve afectada cuando hay muy pocos participantes en la sociedad.

¿Qué hacer para cumplir con ambos elementos?

  1. Generar condiciones para que todos puedan participar: desarrollo de infraestructura, castigar discriminación y exclusión, castigar monopolios, eliminar el capitalismo de cuates, fomentar la participación de todos los grupos, tener eficientes sistemas financieros, promover estabilidad económica, fomentar la protección de los derechos de todos.
  2. Brindar las herramientas necesarias para que la población en desventaja tenga oportunidades similares a las de cualquier persona para participar en alguna actividad.

Si tuviéramos que dividir el trabajo, a la política social (Secretaría de Salud, Educación, Conapred, CNDH, Sedesol, Sedatu) le tocaría asegurarse que los hogares tengan suficientes capacidades educativas, de salud, financieras, alimentarias, de protección contra la discriminación y la exclusión, parar igualar las oportunidades de todos en la sociedad diversa con que contamos. Ni más ni menos cumplir la Constitución en materia de acceso efectivo a los derechos.

A la política económica le tocaría generar condiciones para que existan oportunidades y empleos. Aquí intervienen la Secretaría de Economía, Hacienda, Sagarpa (en su versión productiva), Trabajo, el Banco de México, Cofece, la banca de desarrollo.

¿Hemos cumplido con lo anterior en 25 años? Usted juzgue el ámbito económico: Entre 1992 y 2016 el PIB por persona ha tenido un crecimiento promedio anual de sólo 1.1% (en Corea del Sur, Chile y Brasil ha sido de 4.1, 3.5, y 1.5 por ciento, respectivamente).

En cuanto a la política social, la cobertura de servicios básicos se ha incrementado, como lo muestra el Cuadro 1, especialmente para los hogares más pobres. Pero también existen problemas importantes: a) la calidad de los servicios educativos y de salud es precaria para la población con menos ingresos, b) en 2017 se contabilizan cerca de 5,500 programas sociales en todo el país, muchos de los cuales no muestran impacto positivo en la sociedad, c) se han generado apoyos diferenciados para población formal e informal, fragmentando la política social y d) hay brechas enormes en grupos sociales concretos.

En este último punto, por ejemplo, mientras en 2014 el 45.9% de los adultos mayores eran pobres en el país, el 75.5% de adultos mayores que eran mujeres indígenas estaba en pobreza. En materia de género siguen existiendo brechas muy grandes: la participación de mujeres en los congresos de Querétaro, Coahuila, Nuevo León y Puebla, es de sólo 8, 12, 14 y 14.6 por ciento respectivamente.

Cuadro 1: Veinticinco años de evolución de las carencias sociales, México, 1990-2015

Es decir, hemos tenido en 25 años una muy pobre generación de valor económico; sí hemos mejorado coberturas básicas, especialmente para los hogares más pobres, pero estamos todavía muy lejos de que todos los grupos sociales tengan oportunidades similares de participación económica, política y social.

Lo anterior se refleja en dos resultados mixtos en materia de pobreza: a) la pobreza, que es la consecuencia de la política económica más la política social, no ha cambiado en 25 años (53.1% en 1992 y 53.2% en 2014); b) la pobreza extrema ha disminuido debido a la acción focalizada de algunos programas en los hogares más pobres (11.3% en 2010 y 9.5% en 2014).

Para mejorar estos resultados, en los siguientes 25 años será imperativo tener un crecimiento económico por arriba del 5%. Se requiere también tomar como hilo conductor el acceso efectivo a los derechos, y tener una estrategia de inclusión plena que distribuya mejor el poder entre los diferentes grupos sociales. Lo anterior es una mejor estrategia que simplemente hacer entregas a beneficiarios, lo cual se presta a ocurrencias y a favorecer apoyos políticos.

Una sociedad que produce poco valor agregado, y éste es generado por relativamente pocas personas, no es muy exitosa: no es ni justa ni eficiente.

Firma de convenio con el gobierno de Quintana Roo

 

Con la finalidad de contribuir a la creación y uso de elementos de monitoreo y evaluación de la política social en las entidades federativas, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) y el Gobierno del estado de Quintana Roo firmaron un Convenio de Coordinación mediante el cual este Consejo asesorará en el diseño y aplicación del modelo de monitoreo y evaluación que desarrolle el estado tanto para su política y programas sociales como para sus municipios, asimismo contribuirá en la formación de recursos humanos para impulsar el análisis de la pobreza, el monitoreo y la evaluación estatal.

La firma del Convenio fue encabezada por el Secretario Ejecutivo del CONEVAL, Gonzalo Hernández Licona, y el Gobernador de la entidad Carlos Manuel Joaquín González, quien estuvo acompañado por el Secretario de Desarrollo Social e Indígena, Julián Javier Ricalde Magaña. También estuvieron presentes: Remberto Estrada Barba, Presidente municipal de Benito Juárez; Eduardo Martínez Arcila, Diputado Presidente de la Gran Comisión de la XV Legislatura del Congreso del estado; Fidel Gabriel Villanueva Rivero, Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia, y Tirso Ordaz Coral, Rector de la Universidad del Caribe.

El Convenio de Coordinación tiene entre sus objetivos: a) asesorar en el diseño y aplicación del modelo de monitoreo y evaluación que desarrolle la entidad tanto para su política y programas sociales como para sus municipios; b) coordinar con el estado de Quintana Roo las actividades que se realicen, así como designar a las y los servidores públicos que participen en la ejecución de las mismas; c) contribuir en la formación de recursos humanos para impulsar el análisis de la pobreza, el monitoreo y la evaluación de la política social estatal; d) apoyar las asesorías técnicas y capacitación, y e) compartir información pública que se relacione con el convenio signado.

Colaboración con el estado
Desde 2009, el CONEVAL ha colaborado con el Gobierno de Quintana Roo con actividades de capacitación de la metodología de marco lógico, así como con las siguientes asesorías:

• Generación de indicadores para monitorear programas a cargo de los Servicios Educativos de Quintana Roo (2011);
• creación de la Matriz de Indicadores para Resultados (MIR) para programas sectoriales y espaciales (2011);
• tipos de evaluación que podían realizarse a los programas estatales (2012), y
• Ramo 33 en colaboración con el Instituto de Evaluación del Desempeño (2017).

Coneval también ha participado en el taller “Elaboración de Indicadores de Rezago Social” y en la conferencia “La medición de la pobreza en México e indicadores de tendencia de corto plazo ITLP” en la Universidad de Quintana Roo.

Con este tipo de acciones, el CONEVAL cumple su función como órgano de consulta y asesoría en materia de evaluación de programas sociales y medición de pobreza con las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, con las autoridades estatales y municipales, así como como el sector social y privado.

La evaluación de la política social y de los programas sociales tiene la finalidad de generar información objetiva para su mejora continua.

Un mecanismo de evaluación sólido fortalece la transparencia y la rendición de cuentas al informar a la ciudadanía, quien aporta los recursos para la ejecución de la política social, sobre los resultados de las diferentes acciones.

Al generar la información sobre la medición de la pobreza y la evaluación de programas sociales y hacerla pública, el CONEVAL contribuye para que las autoridades federales, estatales y municipales desarrollen políticas públicas con base en datos objetivos para lograr el bienestar de la ciudadanía, la cual cada día exige mayor rendición de cuentas.

El CONEVAL considera que aunque las entidades federativas han hecho esfuerzos importantes en materia de evaluación, aún existe el reto de impulsar la generación de evaluaciones externas e independientes de programa sociales estatales para mejorar la política social en las entidades federativas. Asimismo, al hacer públicas dichas evaluaciones se fortalece la transparencia y la rendición de cuentas ante la ciudadanía.

El CONEVAL ha firmado convenios de coordinación técnica con los gobiernos de Chiapas, CDMX, Estado de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, San Luis Potosí, Tabasco, Yucatán, Chihuahua, Hidalgo, Zacatecas, Oaxaca, Puebla, Nuevo León.

Más información del estado de Quintana Roo aquí